Gran partido el que pudimos vivir el domingo entre Sevilla y Real Madrid en el Sánchez Pizjuán, donde los de Manolo Jiménez fueron superiores y por ello se llevaron la victoria. Justo el resultado de 2-1 final, aunque si no llega a ser por Iker Casillas, seguro que los de Nervión se hubieran llevado una victoria más abultada. Sin duda el Sevilla ha dado un golpe a la apuesta por la liga, colocándose con los mismos puntos que el Madrid y dejando escapar en solitario a un Barcelona que cuenta con 3 puntos más.
El encuentro comenzó con un Sevilla valiente, sin miedo por tener enfrente el equipo del que tanto se ha hablado este verano. La baja de Cristiano Ronaldo ponía las cosas u poco más fáciles, pero no daba la victoria antes del partido. Fue a la media hora de partido cuando el pequeño Navas abrió el marcador en el Pizjuán. El joven jugador de Los Palacios aprovechó la poca chispa de Marcelo para rematar a gol.
Navas y Perotti, Perotti y Navas, un arma letal que el Real Madrid pudo sentir en sus propias carnes, sin quietarle mérito0 a un Zokora que se hizo dueño del centro del campo. Ya en la segunda parte, Casilla realizó una de las mejores paradas de la historia del fútbol, sacándole un balón en boca de gol a un Perotti que mucho pensará todavía en esa ocasión. Para colmo, tan solo minutos después, el Real Madrid empató el partido gracias a un gran remate del central Pepe.
Pero el Sevilla sabía que la noche del domingo era suya, y que la siempre fiel afición del Pizjuán estaba allí para celebrar una victoria. Hay que decir que el Madrid se creció, lo que no importó a un Sevilla que siguió haciendo su juego.
Por ello, pasada la hora del partido, Renato volvió a hacer justicia en un partido que el Sevilla de Champions League salió a ganar. Muy parecido al primer gol, Renato remató de cabeza para volver a poner por delante en el marcador a los nervionenses. Resultado final de 2-1, más que justo, el cual pone al Sevilla en la lucha por el título, aunque recordar que estamos en octubre, mes en el que es imposible ganar ningún título.
Photo: http://www.flickr.com/photos/36249908@N07/3982206773/in/photostream/
El encuentro comenzó con un Sevilla valiente, sin miedo por tener enfrente el equipo del que tanto se ha hablado este verano. La baja de Cristiano Ronaldo ponía las cosas u poco más fáciles, pero no daba la victoria antes del partido. Fue a la media hora de partido cuando el pequeño Navas abrió el marcador en el Pizjuán. El joven jugador de Los Palacios aprovechó la poca chispa de Marcelo para rematar a gol.
Navas y Perotti, Perotti y Navas, un arma letal que el Real Madrid pudo sentir en sus propias carnes, sin quietarle mérito0 a un Zokora que se hizo dueño del centro del campo. Ya en la segunda parte, Casilla realizó una de las mejores paradas de la historia del fútbol, sacándole un balón en boca de gol a un Perotti que mucho pensará todavía en esa ocasión. Para colmo, tan solo minutos después, el Real Madrid empató el partido gracias a un gran remate del central Pepe.
Pero el Sevilla sabía que la noche del domingo era suya, y que la siempre fiel afición del Pizjuán estaba allí para celebrar una victoria. Hay que decir que el Madrid se creció, lo que no importó a un Sevilla que siguió haciendo su juego.
Por ello, pasada la hora del partido, Renato volvió a hacer justicia en un partido que el Sevilla de Champions League salió a ganar. Muy parecido al primer gol, Renato remató de cabeza para volver a poner por delante en el marcador a los nervionenses. Resultado final de 2-1, más que justo, el cual pone al Sevilla en la lucha por el título, aunque recordar que estamos en octubre, mes en el que es imposible ganar ningún título.
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